La cirugía reparadora

¿Para qué sirve?

Se entiende por cirugía reparadora, una cirugía cuyo objetivo es corregir algunos defectos de los huesos que son responsables de una morfología anormal de una articulación. Así pues, a veces, se tiene que corregir el eje de una rodilla o una malformación de la cadera.

¿Cómo funciona?

Cirugía reparadora

Los defectos morfológicos conllevan presiones anormales en algunas partes del cartílago de la articulación afectada y, por lo tanto, un desgaste mayor. Corrigiendo el defecto existente, las presiones se reparten mejor en toda la superficie del cartílago que, por lo tanto, se desgastará menos.

Por lo tanto, es fácilmente comprensible que cuando existen estos defectos, conviene practicar estas intervenciones de forma precoz, es decir, en cuanto aparecen los primeros síntomas de osteoartritis. En efecto, si el cartílago está demasiado dañado, estas medidas ya no resultarán eficaces.

¿Qué precauciones tomar?

Las osteoartritis de rodilla y cadera son las que, en ocasiones, pueden beneficiarse de este tipo de intervención.

Se trata de intervenciones pesadas: requieren una hospitalización de unos diez días e impiden apoyar la pierna operada durante 6 semanas.

Los riesgos son los mismos que los de cualquier intervención quirúrgica (flebitis, embolia pulmonar y riesgos vinculados a la anestesia), así como riesgos de infección.